LA MIRADA APRECIATIVA

El poder transformador de nuestra mirada hacia los demás

Por: muki@mukipalacios.com

Creo profundamente en el poder transformador y gran impacto que pueden causar no solo nuestras palabras sino nuestra mirada hacia los demás. Hoy más que nunca necesitamos incrementar nuestra capacidad de valoración para que surja el aprecio, el reconocimiento y la admiración.

Para ello hay que superar los condicionamientos que nos imponen la cultura y tradición de enfocarnos más en los problemas, los errores y los defectos que en los aspectos positivos. Vemos en nuestro diario vivir a quienes se sorprenden por todo y hacen de lo ordinario algo extraordinario y, por otro lado, a  quienes tienen una mirada indiferente ante las cosas con mayor atención en lo negativo que lo positivo.

Muchos de nosotros no somos conscientes de cómo nuestra mirada condiciona y determina la calidad del vínculo con el otro. Si nos detenemos por un momento y  nos ponemos a pensar en esas personas que nos dieron alas, que nos dieron confianza y creyeron en nosotros; nos daremos cuenta que ahí estuvo presente la mirada apreciativa. Una mirada que, a veces, no necesita palabras; una mirada que da alas y saca lo mejor de uno y lo empodera a ser o convertirse en su mejor versión.

Bien lo decía el gran poeta y novelista Wolfgang Von Goethe: “Si tratas a un ser humano como es, seguirá siendo lo que es; pero si lo tratas como puede llegar a ser, se convertirá en lo que está destinado a ser”.

Empecemos entonces por agudizar esta  mirada  apreciativa hacia nosotros mismos y  ver nuestra propia luz. ¿Cómo? Enfocándonos en lo que está bien, en nuestros recursos, nuestras fortalezas y posibilidades.

Es importante darnos el permiso de reconocer todo lo valioso que hay en nuestras vidas para luego poder reflejarlo en todo y con los demás, porque cuando nos miramos desde la apreciatividad, reconociendo lo valioso que hay  -nuestra elección consciente de quedarnos con lo mejor para a partir de ahí construir-  nos llenamos de inspiración, haciendo brillar lo más luminoso en nosotros, los demás y nuestro entorno.

 

¿Pero qué es la Apreciatividad?

La apreciatividad es la habilidad de reconocer el valor y significado de una persona, objeto o situación. Pero no queda en el reconocimiento cognitivo, pues esta implica un reconocimiento emocional producto de una conexión intensa con ese algo, y es esta conexión la que vuelve preciado y valioso para uno.

La Psicología Positiva nos muestra que podemos aprender a desarrollar esta habilidad que nos permite vivir rescatando lo valioso y significativo de las personas, circunstancias y objetos. Nos permite agudizar nuestra observación y volverla deliberada para rescatar lo mejor y lo mas preciado.

Apreciar lo que tenemos es un ingrediente importante de la felicidad que va de la mano de la GRATITUD, que nos permite reconocer, valorar y apreciar las  cosas valiosas que hay en nuestras vida. La gratitud hace que lo que tengas hoy cobre sentido.

Y para desarrollarla te invito a que te ejercites en aplicar  nuestro método para despertar la apreciatividad en el diario vivir llamado POSA (Para, observa, siente y agradece) 

La mirada apreciativa es una actitud esperanzadora que está a nuestro alcance y una decisión que podemos eliger tomar cada hora, cada día, cada semana, cada año y así construir una gran vida: más consciente y  más sentida.

“Cuando buscamos descubrir lo mejor en los demás, de alguna manera aflora lo mejor de nosotros” 

William Arthur Ward.